Mientras el mundo mira aranceles y semiconductores, hay una carrera que avanza sin ruido: el oro digital.
Dos potencias mundiales compiten ahora por acumular reservas de BTC. No es casualidad. Controlar este activo significa tener ventaja en negociaciones internacionales, protección frente a bloqueos financieros y acceso a liquidez instantánea sin intermediarios.
La nación que logre mayor acumulación y custodia segura podría definir las reglas del próximo sistema monetario. La pregunta ya no es si importa, sino quién llegará primero.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
13 me gusta
Recompensa
13
6
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
ETH_Maxi_Taxi
· 11-06 11:47
Primero recolecta BTC y luego hablemos.
Ver originalesResponder0
JustHereForMemes
· 11-04 17:09
Ya están haciendo esto, ya lo han dejado claro para todos.
Ver originalesResponder0
LightningPacketLoss
· 11-03 23:38
Esta batalla por la moneda es realmente emocionante.
Ver originalesResponder0
OfflineValidator
· 11-03 23:35
¿Por qué el BTC ahora está generando comparaciones entre países?
Ver originalesResponder0
CryptoTherapist
· 11-03 23:30
vamos a desglosar el síndrome de fomo masivo que estamos presenciando en la acumulación de btc por parte de los estados-nación... fascinante estudio de caso, para ser honesto
Mientras el mundo mira aranceles y semiconductores, hay una carrera que avanza sin ruido: el oro digital.
Dos potencias mundiales compiten ahora por acumular reservas de BTC. No es casualidad. Controlar este activo significa tener ventaja en negociaciones internacionales, protección frente a bloqueos financieros y acceso a liquidez instantánea sin intermediarios.
La nación que logre mayor acumulación y custodia segura podría definir las reglas del próximo sistema monetario. La pregunta ya no es si importa, sino quién llegará primero.