El cierre del gobierno no es la primera vez que ocurre en el mundo Cripto. Si revisamos los libros de historia, podemos encontrar varias coincidencias interesantes.

Empecemos desde la época de Clinton. La paralización de noviembre de 1995 solo duró 5 días, fue una prueba pequeña. Luego, desde diciembre hasta enero del año siguiente, hubo otra ronda, que se prolongó durante 21 días. En ese momento, ni siquiera había rastro de Bitcoin, pero el espectáculo del tira y afloja entre los dos partidos se convirtió en un programa habitual.

La verdadera reacción química con el mundo Cripto ocurrió durante esos 16 días de octubre de 2013. En ese momento, el S&P 500 de EE. UU. estaba estancado, el BTC, aunque todavía era una cosa minoritaria, pero esa crisis de deuda hizo que muchas personas comenzaran a pensar: con el tradicional sistema financiero en tal agitación, ¿no sería mejor buscar activos que no estén controlados por el gobierno? Esto puede considerarse como la siembra de la narrativa del "oro digital" de Bitcoin.

Las dos suspensiones de 2018 fueron aún más emocionantes. En enero, solo 3 días no causaron gran revuelo, pero la de finales de año fue diferente: ¡duró 35 días enteros desde diciembre hasta enero de 2019! Las acciones estadounidenses cayeron 15 puntos, pero el Bitcoin se disparó de 3200 dólares a 4000, con un aumento de más de una cuarta parte. Cuanto más pánico había en los mercados tradicionales, más se acumulaba el capital en activos digitales, mostrando de manera espectacular su propiedad de refugio.

Ahora en 2025, esta ronda de parálisis ya ha igualado el récord más largo de la historia. La historia no se repite de manera simple, pero siempre sigue rimas similares. ¿Volverá el mercado a representar el acto de la transferencia de fondos? ¿Cómo se debería escribir este guion esta vez? Estemos atentos.