El tercer trimestre trajo un impulso importante de vuelta a los préstamos en criptomonedas. ¿Los volúmenes de préstamos? Acaban de romper récords anteriores. Y el momento no podría ser más interesante: este aumento ocurrió justo al mismo tiempo que los activos digitales alcanzaban nuevos máximos históricos. La correlación no es sutil: a medida que los precios subían, la actividad de préstamo explotaba. Tanto instituciones como inversores minoristas parecen tener hambre de apalancar sus holdings. La infraestructura de préstamos, que apenas sobrevivió a las recesiones anteriores, ahora está procesando flujos de capital sin precedentes. Si esto significa un crecimiento sostenible o el pico de otro ciclo, sigue siendo la pregunta de un millón de dólares que todos se hacen.