Pekín acaba de soltar un bombazo: el gobierno lanzó el “Beijing Blockchain Innovation and Application Development Action Plan (2025-2027)”, posicionando blockchain como infraestructura digital estratégica en lugar de solo tech emergente.
La jugada política: “one chain, one network, one platform”
No es un plan regional cualquiera. Múltiples ministerios (Comisión de Ciencia y Tecnología, Administración del Ciberespacio, entre otros) unieron fuerzas para construir:
Una cadena: blockchain de próxima generación 100% autónoma, con criptografía y consenso propios
Una red: infraestructura nacional que soporte “almacenamiento de nodos a nivel petabyte” e interoperabilidad entre 10,000+ cadenas
Una plataforma: servicio unificado con gestión de identidad digital, directorios de datos cross-chain, y soporte para “cientos de millones de identidades digitales”
Cinco sectores en la mira
Peking busca crear 20+ casos de uso emblemáticos para 2027 en:
Sanidad: historial médico inmutable + datos genéticos seguros
Educación: diplomas en cadena, fin del fraude académico
Finanzas: financiamiento de cadena de suministro, pagos cross-border, contratos digitales
Transporte: datos de tráfico compartidos, logística optimizada
IA: trazabilidad de modelos, protección de copyright, combate al sesgo algorítmico
La frase que despierta especulación
“Mejorar la capacidad de conversión de valor de activos digitales mediante blockchain” — esta línea está haciendo ruido en la industria.
¿Qué significa? En el contexto de prohibición estricta de Bitcoin en China, algunos leen esto como: posible espacio futuro para tokenización de activos (no-criptomoneda), derechos de propiedad intelectual y certificados digitales bajo marcos regulatorios específicos.
Nada confirmado aún, pero la puerta no está completamente cerrada.
El patrón chino diferente
A diferencia de Occidente (bottom-up, market-driven, innovación financiera activa), China sigue su propio camino:
Top-down: diseño estatal, liderado por gobierno
Tech-first, not crypto-first: blockchain sí, especulación con cryptos no
Real economy focus: mejora de eficiencia, no productos financieros riesgosos
Control regulatorio total: cero tolerancia a lavado de dinero o amenazas a soberanía monetaria
Qué significa esto
Peking está acelerando de fase piloto a despliegue sistémico a escala nacional. Blockchain ya no es un experimento; es infraestructura crítica.
Aunque el espacio para cripto sigue limitado, la tecnología subyacente que empodera industrias enteras tiene vía libre. Espera ver más integraciones en datos médicos, finanzas y AI en los próximos 3-5 años.
El movimiento es claro: blockchain sí, dinero digital no (por ahora).
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China apuesta fuerte por blockchain: plan estatal 2025-2027 marca giro estratégico
Pekín acaba de soltar un bombazo: el gobierno lanzó el “Beijing Blockchain Innovation and Application Development Action Plan (2025-2027)”, posicionando blockchain como infraestructura digital estratégica en lugar de solo tech emergente.
La jugada política: “one chain, one network, one platform”
No es un plan regional cualquiera. Múltiples ministerios (Comisión de Ciencia y Tecnología, Administración del Ciberespacio, entre otros) unieron fuerzas para construir:
Cinco sectores en la mira
Peking busca crear 20+ casos de uso emblemáticos para 2027 en:
La frase que despierta especulación
“Mejorar la capacidad de conversión de valor de activos digitales mediante blockchain” — esta línea está haciendo ruido en la industria.
¿Qué significa? En el contexto de prohibición estricta de Bitcoin en China, algunos leen esto como: posible espacio futuro para tokenización de activos (no-criptomoneda), derechos de propiedad intelectual y certificados digitales bajo marcos regulatorios específicos.
Nada confirmado aún, pero la puerta no está completamente cerrada.
El patrón chino diferente
A diferencia de Occidente (bottom-up, market-driven, innovación financiera activa), China sigue su propio camino:
Qué significa esto
Peking está acelerando de fase piloto a despliegue sistémico a escala nacional. Blockchain ya no es un experimento; es infraestructura crítica.
Aunque el espacio para cripto sigue limitado, la tecnología subyacente que empodera industrias enteras tiene vía libre. Espera ver más integraciones en datos médicos, finanzas y AI en los próximos 3-5 años.
El movimiento es claro: blockchain sí, dinero digital no (por ahora).