Los datos de los proyectos de infraestructura pueden ser impresionantes, pero no tiene sentido mirar solo los números.

La clave es aclarar: ¿cómo se recupera el dinero?

Tomando como ejemplo el protocolo de conexión de una billetera clásica, su camino de exploración es bastante interesante:

El volumen total de transacciones en cadena del año ha superado los 400 mil millones de dólares. Tenga en cuenta que no se trata de capitalización de mercado ni de financiamiento, sino del volumen de transacciones y operaciones de firma que se realizan con dinero real en el protocolo.

Una gran cantidad de transacciones, firmas y diversas acciones en la cadena, todo se realiza a través de este protocolo.

La pregunta es: ¿cómo monetizar un tráfico tan grande? Simplemente ser un tubero no es suficiente, hay que pensar en un ciclo comercial cerrado. La infraestructura no carece de usuarios, lo que falta es el mecanismo para convertir el valor del usuario en ingresos de protocolo.