Mucha gente piensa que para ganar dinero en el mundo cripto hay que dominar decenas de indicadores y estudiar un montón de modelos complejos. Pero siendo sincero, estos años he pasado de estar endeudado a tener ocho cifras, y no ha sido gracias a ninguna técnica sofisticada, sino a un sistema de disciplina “tonto de lo simple”. Tan sencillo que solo tiene 4 pasos, pero en estos ocho años casi nunca he cometido errores graves.

Lo que realmente me hizo salir adelante no fue la suerte, sino ceñirme a la lógica más fácil de ejecutar.

**Primera regla: solo miro el gráfico diario y descarto todo el ruido**

No me fijo en periodos de 1 minuto o 5 minutos que solo vuelven loco a cualquiera. Solo reconozco una señal: cruce dorado del MACD, y mejor si aparece por encima del eje 0. Esa estructura de tendencia es la más clara y la que tiene mayor tasa de éxito, sin necesidad de hacer juicios complicados.

**Segunda regla: me aferro a una media móvil clave: la media diaria**

La regla es sencilla:
¿El precio está por encima de la media? Mantengo la posición.
¿El precio está por debajo? No toco, no apuesto, no sueño.

Esa línea te ayuda a filtrar el 90% del dinero que no deberías perder.

**Tercera regla: todas las compras, ventas y aumentos de posición, se ejecutan de forma mecánica**

Después de comprar, en cuanto vea:
✔ se sitúa por encima de la media diaria
✔ rompe con volumen la media de volumen diario

→ Aumento la posición al máximo, cuando llega la tendencia no hay que dudar.

En cuanto a la venta:
¿Sube un 40%? Reduzco un tercio.
¿Sube un 80%? Reduzco otro tercio.
¿Pierde la media diaria? Vendo todo.

Sin emociones, sin esperanza, todas las operaciones siguen la regla.

**Cuarta regla: si pierde la media, vende, no te engañes pensando “ya volverá”**

Si la compra se basa en la estructura diaria, en cuanto la pierda hay que ejecutar el stop loss. Sin dudar y sin miedo a quedarse fuera: si vuelve a situarse por encima, puedes volver a comprar.

Este método puede no sonar cool ni avanzado, pero es este “sistema tonto” el que me permitió pasar del fondo a la rentabilidad estable, y en ocho años trazar una curva de activos en constante crecimiento.

Nunca vendo la fantasía de hacerse rico de la noche a la mañana, solo cuento lo que se puede aplicar, ejecutar y que de verdad da dinero. Si quieres aprender un sistema, darle la vuelta a la situación, dejar atrás las operaciones emocionales, todavía tienes la oportunidad de recuperar lo perdido.