Mira, los grandes siempre dicen — la comunidad es la clave. Pero, ¿qué es exactamente una comunidad? No es solo crear un grupo y estar chateando todo el día.

Una comunidad que realmente funciona es aquella donde un grupo de “tontos duros” creen sinceramente en ese meme, están dispuestos a trasnochar dibujando, escribiendo chistes, discutiendo y reconciliándose, incluso asumiendo el papel de atención al cliente o organizando información. Es como esos vecinos que todos los días organizan partidos de baloncesto o arreglan el jardín — nadie les paga, pero ellos disfrutan hacerlo.

Las cosas de meme, su vitalidad no viene de lo impresionante que sean, sino de que siempre hay alguien creando nuevos chistes, inventando historias, jugando con nuevas ideas. Si nadie dice nada, nadie hace nada, nadie se esfuerza en esas tareas triviales, incluso la visión más brillante se reduce a un simple título en un grupo de amigos.

De lo contrario, lo que quedará al final será solo la palabra “comunidad” desgastada, junto con un grupo de hermanos que se sientan en la puerta, listos para irse en cualquier momento — cuando llega el viento, desaparecen.

Al final, una comunidad no es solo minar y luego irse, sino un terreno que todos construyen juntos. Hay que regar, quitar las malas hierbas, y de vez en cuando sentarse a comer sandía y hablar de cosas sinceras.