¿10000 tipos o 20000 tipos? La verdad detrás del crecimiento explosivo de las criptomonedas

¿Quieres saber cuántas criptomonedas existen actualmente? Esta pregunta parece sencilla, pero la respuesta es sorprendentemente compleja. Según estadísticas de Statista, hasta septiembre de 2024, la cantidad de criptomonedas se acerca a las 10,000. Pero esto no es todo: algunas fuentes afirman que en todo el mundo existen aproximadamente 20,000 criptomonedas, aunque la mayoría de ellas ya se han convertido en “proyectos zombis”, ya sea completamente descontinuados o virtualmente inactivos.

¿Cómo interpretar los datos?

Contar con precisión cuántas criptomonedas hay en realidad es bastante difícil, ya que nuevos proyectos nacen cada día y otros desaparecen. Según CoinMarketCap, actualmente se rastrean unas 9,916 criptomonedas; mientras que CoinGecko registra 15,142. Por eso nadie puede dar una cifra absolutamente exacta: el mercado está en constante cambio y los criterios de conteo varían.

Pero hay algo que está claro: desde la creación de Bitcoin en 2009, la cantidad de tipos de criptomonedas ha aumentado miles de veces. ¿Qué ha pasado realmente?

¿Por qué hay tantas criptomonedas?

La respuesta es sencilla: el umbral de entrada es demasiado bajo.

Gracias a la popularización y desarrollo de la tecnología blockchain, incluso desarrolladores con conocimientos básicos de programación pueden crear fácilmente su propio proyecto de criptomonedas. Especialmente después de la aparición de plataformas como Ethereum, los desarrolladores ya no necesitan construir su propia blockchain desde cero; pueden simplemente crear tokens sobre una existente.

Este bajo umbral ha impulsado una ola de innovación. Cada nuevo proyecto afirma tener alguna ventaja única: mayor velocidad de transacción, mejor protección de la privacidad, o aplicaciones específicas para ciertos sectores. Algunos incluso apuntan a juegos, arte o cadenas de suministro. Aunque la mayoría de estos proyectos acabarán siendo olvidados, esta cultura de prueba y error impulsa el progreso y la innovación en todo el ecosistema cripto.

Clasificación principal de las criptomonedas

Bitcoin y sus derivados

Bitcoin es el pionero y la criptomoneda más conocida. Propone un concepto completamente nuevo: una moneda digital descentralizada y peer-to-peer, sin intervención de ningún gobierno. Luego surgieron Bitcoin Cash y Bitcoin SV, versiones bifurcadas de Bitcoin, que ajustan parámetros para mejorar la velocidad de transacción o reducir costos.

Altcoins

En resumen, todas las criptomonedas que no son Bitcoin se consideran altcoins. Ethereum ofrece funciones avanzadas de contratos inteligentes, mientras que Solana destaca por su velocidad de transacción casi instantánea y bajos costos. Cada una intenta encontrar su lugar en este mercado saturado.

Stablecoins

Este tipo de monedas tiene un objetivo muy claro: eliminar la volatilidad. Generalmente están vinculadas a activos reales como el dólar, y Tether es el representante más popular en este campo, ofreciendo a los traders una reserva de valor estable.

Meme Coins

Dogecoin y Shiba Inu nacieron como productos de la cultura de internet, y al principio nadie las tomaba en serio. Pero la viralidad en redes sociales cambió todo, convirtiéndolas en participantes reales del mercado. Pepe Coin, inspirado en memes de ranas, también ha causado revuelo en el mundo cripto.

Tokens de utilidad (Utility Tokens)

Estos tokens están diseñados para impulsar aplicaciones específicas. Chainlink actúa como puente entre contratos inteligentes y datos del mundo real, mientras que Uniswap desempeña un papel en la gobernanza de los protocolos de intercambio descentralizado.

¿Qué criptomonedas son realmente importantes?

Aunque existen miles de criptomonedas, solo unas pocas tienen un impacto real en el mercado y un valor a largo plazo.

Bitcoin sigue siendo indiscutiblemente el rey: fue la primera, la más reconocida y la que tiene la mayor capitalización. Ethereum es la segunda en importancia, con su capacidad de contratos inteligentes que ha impulsado todo el ecosistema DeFi y NFT. Solana, por su parte, ha ganado atención por su altísima capacidad de transacción y en ciertos momentos fue un competidor principal de Ethereum.

En cuanto a las meme coins, aunque atraen atención y fondos, su valor a largo plazo sigue siendo una incógnita. Los proyectos que realmente pueden cambiar la industria son aquellos con una base técnica sólida y aplicaciones amplias — y estos son pocos.

El mundo de las criptomonedas sigue evolucionando rápidamente, pero solo unos pocos dejarán huella en la historia.

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