Últimamente me preguntan con frecuencia sobre la verdadera posición de Kindred en el nivel técnico. Para ser honesto, al principio no le presté mucha atención, pensaba que era solo otro proyecto de compañero AI. Luego, al estudiar detenidamente su lógica de diseño de Mind, me di cuenta de que su enfoque es realmente diferente y poco convencional.

La estrategia de Kindred no consiste simplemente en acumular más parámetros en el modelo, sino en explorar una dirección más interesante: cómo hacer que la experiencia de interacción se asemeje a un objeto que realmente existe, que pueda recordar detalles, tenga juicio y entienda cómo colaborar. La estructura de Mind que han desarrollado hace una elección diferenciadora en este aspecto: no se trata de quién tiene más potencia de cálculo, sino de quién puede parecerse más a un compañero que realmente te entiende. Esta idea tiene un impacto algo disruptivo en toda la trayectoria de los AI companions.