El verdadero cuello de botella para los agentes autónomos no es la inteligencia bruta, sino la incapacidad del sistema para reconocer cuándo comienza la adaptación. Piénsalo: un agente puede ser perfectamente capaz, pero si el marco no puede detectar el momento exacto en que necesita pivotar, todo se desmorona. La brecha no está en el pensamiento del agente. Está en la validación. Sin un mecanismo para verificar los cambios de estado y activar los cambios necesarios, incluso la lógica sofisticada no lleva a ninguna parte. Ahí es donde la mayoría de los proyectos se encuentran con el muro.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
9 me gusta
Recompensa
9
4
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
MEV_Whisperer
· hace19h
En pocas palabras, el problema de la validación es demasiado grande, y muchos proyectos mueren aquí, lo cual no es injusto.
Ver originalesResponder0
SatoshiLeftOnRead
· hace19h
ngl esto es muy acertado, la capa de validación es el verdadero cuello de botella, no es un problema de inteligencia.
Ver originalesResponder0
HashBrownies
· hace19h
Tienes razón, la validación es efectivamente el talón de Aquiles de la mayoría de los proyectos, no importa cuán inteligente sea el agente.
Ver originalesResponder0
CompoundPersonality
· hace19h
Tienes toda la razón, la capa de validación está seriamente subestimada, todos están compitiendo por los resultados de inteligencia, y al final mueren en el reconocimiento de estados.
El verdadero cuello de botella para los agentes autónomos no es la inteligencia bruta, sino la incapacidad del sistema para reconocer cuándo comienza la adaptación. Piénsalo: un agente puede ser perfectamente capaz, pero si el marco no puede detectar el momento exacto en que necesita pivotar, todo se desmorona. La brecha no está en el pensamiento del agente. Está en la validación. Sin un mecanismo para verificar los cambios de estado y activar los cambios necesarios, incluso la lógica sofisticada no lleva a ninguna parte. Ahí es donde la mayoría de los proyectos se encuentran con el muro.