Los tokens de alta concentración como Pippin realmente merecen atención.

Volviendo al medio de diciembre, después de que el proyecto anunciara una colaboración con Mind Network, Pippin alcanzó un nuevo máximo el 17 de diciembre, aumentando claramente el interés a corto plazo. Sin embargo, los datos en cadena que siguieron echaron un balde de agua fría: el informe del 18 de diciembre indicó que más del 80% de los Token internos estaban en manos de unos pocos poseedores, y este extremo desequilibrio en la distribución de los Token sembró el riesgo de que los grandes inversores se retiraran y los pequeños inversores tuvieran que asumir las pérdidas.

El equipo del proyecto claramente también ha reconocido este problema. El 20 de diciembre publicaron una hoja de ruta de IA, intentando aumentar el valor de uso real del Token a través de nuevas funciones y escenarios de aplicación, para mitigar así los riesgos derivados de la alta volatilidad y concentración. Desde la perspectiva de la actitud, parece que están respondiendo de manera proactiva, pero si este tipo de promesas realmente se materializarán y cuándo el módulo de IA comenzará a tener un impacto real, todavía necesita ser verificado con el tiempo.

El concepto de colaboración es, en última instancia, un impulso emocional a corto plazo. Sin un apoyo de aplicación práctica y con una estructura de Token así, el mercado futuro debe ser observado con cautela.