Cada vez que me preguntan cómo elegir entre tantas criptomonedas, cuándo entrar y cuándo salir, me siento un poco frustrado. La verdad, no hay ninguna tecnología negra ni tampoco busco precisión al segundo. La única regla que me pongo es una: seguir la tendencia, con disciplina férrea.

Este método no garantiza que te hagas rico de la noche a la mañana, pero puede ayudarte a evitar el 90% de las trampas y ganar de manera lenta y segura. ¿Cómo lo hago? Déjame explicártelo lentamente.

**Primer paso, la primera vista del mercado**

Nunca me lanzo directamente a analizar todos los indicadores técnicos, sino que primero busco esas monedas que todavía están "vivas". ¿Qué significa moneda viva? Es aquella que de repente sube, con volumen de negociación disparado y mucha volatilidad. Cuando sientes claramente que el capital está entrando, esa es la verdadera tendencia del mercado. Las monedas que están muertas, sin importar lo baratas que sean, mejor no tocarlas, porque lo barato suele ser barato por algo.

**Segundo paso, usar la línea mensual para planificar la dirección**

Este es el paso más importante. Nunca me dejo engañar por las fluctuaciones diarias, porque lo que realmente decide el destino de una moneda es la tendencia en el marco mensual. Mientras la línea mensual MACD cruce al alza, esa moneda entra en mi lista de posibles compras. Puedes entenderlo como que el motor del gran barco se ha encendido, y lo que sigue es esperar el momento adecuado para subir a bordo.

¿Qué significa que la línea mensual cruce al alza? Significa que la tendencia a medio plazo se invierte, que el capital pasa de estar en fase de acumulación a una fase de impulso real. Es una señal muy significativa.

**Tercer paso, buscar puntos de entrada precisos en la línea diaria**

Ya que la dirección está clara, pongo mi atención en la línea diaria. La referencia más importante aquí es la media móvil de 60 días, que considero como una línea de defensa. Cuando el precio vuelve a tocar esa línea, y el volumen acompaña, empiezo a considerar seriamente construir una posición.

¿No parece esto un coste alto? Es cierto, puede parecer así. Pero, ¿cuál es la ventaja? El soporte abajo ya está bastante claro, así que tengo una idea clara y puedo mantenerme firme ante las volatilidades, sin dejarme llevar por el miedo.

**Cuarto paso, disciplina en la ejecución del stop-loss**

La regla es simple: si el precio cae por debajo de la línea de 60 días de manera efectiva, salgo inmediatamente. Sin excusas como "aún puede rebotar" o "esperar un rebote". Simple y directo. ¿Por qué? Porque proteger el capital es la base, y las oportunidades de ganar todavía estarán allí en el futuro.

**Quinto paso, el arte de tomar ganancias y mantener la posición**

Una vez que las ganancias flotantes están en su lugar, nunca las retiro todas de una vez. La estrategia es vender en partes: asegurar una parte de las ganancias, poner el dinero en el bolsillo; y el resto, lo llamo "posición emocional", que sigo dejando en el mercado. La ventaja de esto es que, ante nuevas turbulencias del mercado, puedo mantenerme tranquilo y no arrepentirme por salir demasiado pronto ante una pequeña corrección.

**¿Por qué este método puede sobrevivir?**

Muchos dirán que mi proceso es demasiado conservador y rígido. Pero después de mucho tiempo en este mercado, uno entiende una cosa: ganar a corto plazo depende de la suerte y del momento, pero para sobrevivir y durar, solo se puede confiar en un sistema y en la disciplina. Un conjunto de reglas que puedas repetir una y otra vez, tiene un poder mucho mayor que una sola subida explosiva.

Porque cuando vuelva el mercado, este sistema te ayudará a mantenerte firme. No tienes que preocuparte por perder oportunidades, porque estas aparecerán periódicamente; lo que da miedo es que las personas sin sistema, ganen y luego lo pierdan todo, incluso en pérdidas.

Así que, si quieres tener un control real sobre tu posición y sincronizar cada movimiento, te recomiendo seguir esta lógica. Mirar la tendencia en la línea mensual, escoger el momento en la línea diaria, y ejecutar estrictamente el stop-loss — parece simple, pero es lo más difícil.