Seguir el precio de Bitcoin en el Día de Navidad durante los últimos 15 años cuenta una historia bastante interesante. En 2010, podías comprar BTC por solo $0.25—la mayoría de la gente ni siquiera sabía qué era. Un año después, el precio saltó a $4, y en 2012 alcanzó los $13. Los primeros en adoptarlo estaban observando algo que la mayoría descartaba como inútil.

Luego llegó 2013, el año explosivo. El Día de Navidad, Bitcoin se negociaba a $682—un salto asombroso que llamó la atención del público general. Pero las criptomonedas no suben en línea recta. 2014 retrocedió fuerte a $319, una caída brutal del 53% que sacudió la confianza. La recuperación llegó gradualmente: $456 en 2015, luego $896 en 2016.

2017 fue la primera gran tendencia alcista. La Navidad trajo $14,027, haciendo que los primeros creyentes fueran extremadamente ricos. La caída siguió—la temporada navideña de 2018 mostró $3,815, un descenso del 73% desde el pico. Ese mercado bajista enseñó a todos sobre la volatilidad.

Luego la larga subida. 2019 cerró en $7,275, 2020 en $24,665, mostrando la entrada de dinero institucional en el espacio. El pico de 2021 alcanzó los $50,430 en Navidad—otro máximo del ciclo. La corrección inevitable lo llevó a $16,831 para las vacaciones de 2022.

2023 se recuperó hasta $43,665 a medida que cambiaban las expectativas. Este año alcanzó el pico en $98,200, aunque el Día de Navidad se estabilizó alrededor de $88,000. Cada ciclo enseñó diferentes lecciones: paciencia, gestión de la volatilidad y la importancia del horizonte temporal al mantener activos en crypto.