¿Los recientes movimientos contra los petroleros venezolanos? Más teatro político que una verdadera aplicación de sanciones. Es una postura performativa, el tipo de llamada de atención que genera buenas apariencias pero carece de sustancia donde realmente importa. La verdadera prueba será observar cómo maneja esta administración los buques rusos o iraníes; ahí es cuando veríamos si hay una verdadera convicción detrás de la política. Por ahora, se lee más como un espectáculo político interno que como un cambio sistémico. Sin consistencia entre diferentes adversarios, estos gestos siguen siendo en gran medida simbólicos. El mercado de criptomonedas observa estos giros geopolíticos con atención; la arquitectura de sanciones impacta directamente en los mercados de commodities, lo que retroalimenta el sentimiento macro. Hasta que no veamos una aplicación uniforme de las sanciones, el escepticismo es justificado.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
12 me gusta
Recompensa
12
5
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
MEVictim
· hace7h
Las sanciones no son más que una obra.
Ver originalesResponder0
PonziWhisperer
· hace7h
El espectáculo político es realmente aburrido
Ver originalesResponder0
ColdWalletAnxiety
· hace7h
No hay espectáculo sin conflicto.
Ver originalesResponder0
ApyWhisperer
· hace8h
De lo abstracto a lo concreto se revela la verdad.
¿Los recientes movimientos contra los petroleros venezolanos? Más teatro político que una verdadera aplicación de sanciones. Es una postura performativa, el tipo de llamada de atención que genera buenas apariencias pero carece de sustancia donde realmente importa. La verdadera prueba será observar cómo maneja esta administración los buques rusos o iraníes; ahí es cuando veríamos si hay una verdadera convicción detrás de la política. Por ahora, se lee más como un espectáculo político interno que como un cambio sistémico. Sin consistencia entre diferentes adversarios, estos gestos siguen siendo en gran medida simbólicos. El mercado de criptomonedas observa estos giros geopolíticos con atención; la arquitectura de sanciones impacta directamente en los mercados de commodities, lo que retroalimenta el sentimiento macro. Hasta que no veamos una aplicación uniforme de las sanciones, el escepticismo es justificado.